El Tíbet alberga tres sitios declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, todos en la capital, Lhasa. Estos tres lugares—el Palacio de Potala, el Palacio Norbulingka y el Templo de Jokhang—son fijos en los itinerarios turísticos del Tíbet, y vale la pena visitarlos. La UNESCO afirma que “la belleza y la originalidad de la arquitectura de estos tres sitios, su rica ornamentación y su integración armoniosa en un paisaje sorprendente, suman a sus atractivos históricos y religiosos”. Aquí hay algunas cosas que debes saber sobre los sitios del Patrimonio Mundial en el Tíbet.
PALACIO DE POTALA
The Potala Palace in Lhasa. Photo: Göran Höglund (Kartläsarn) / Flickr
El icónico Palacio de Potala en Lhasa se construyó originalmente en el siglo VII y luego se convirtió en el siglo XVII en el gran y extenso complejo del palacio que es ahora. Fue el hogar de los Dalai Lamas—los reyes del Tíbet y jefes del budismo tibetano—entre el siglo XVII y mediados del siglo XX.
Además de las impresionantes vistas exteriores, las capillas más pequeñas, las salas de meditación y las habitaciones que se encuentran adentro son igual de hermosas e interesantes. La UNESCO menciona que el palacio contiene 698 murales, casi 10.000 pergaminos pintados, numerosas esculturas, alfombras, doseles, cortinas, porcelana, jade y finos objetos de oro y plata, así como una gran colección de sutras e importantes documentos históricos. Hay mucho que ver aquí.
Si viajas por Tíbet después de volar a Lhasa desde Katmandú, probablemente visitarás el Palacio de Potala durante tu segundo o tercer día en el Tíbet. Esto se debe a que la visita requiere subir muchos escalones, lo que puede ser demasiado agotador para quienes acaban de llegar a la ciudad de gran altitud.
El Palacio de Potala se convirtió en Patrimonio de la Humanidad en 1994.
PALACIO NORBULINGKA
The Norbulingka Summer Palace. Photo: Mondo79 / Flickr
El Palacio Norbulingka era el palacio de verano del Dalai Lama y está rodeado de jardines bien cuidados. Fue construido a partir de 1755. El complejo incluye cuatro palacios, un monasterio y numerosos salones y pabellones sobre más de 36 hectáreas. Los edificios son un ejemplo único de la arquitectura del palacio tibetano y los jardines generalmente se consideran los mejores de su tipo en todo el Tíbet.
Recibe muchos menos visitantes que los otros dos sitios mencionados aquí, ya que no está en el centro de Lhasa, sino a unos dos a tres kilómetros al oeste del Palacio de Potala. Se convirtió en Patrimonio de la Humanidad en 2001.
TEMPLO DE JOKHANG
The Jokhang. Photo: Nao lizuka / Flickr
El Templo de Jhokang, en el centro de la antigua ciudad tibetana de Lhasa, es el templo más sagrado del Tíbet. Está dirigido por la escuela de budismo Gelug, pero está abierto a los fieles de todas las sectas del budismo.
Las partes más antiguas del edificio datan de 652, pero fue construido durante muchos siglos. Su estilo arquitectónico está influenciado por los estilos indios y nepaleses, así como tibetanos. Adentro se pueden ver muchas estatuas y mandalas budistas, pero quizás la característica más atractiva es la vista desde la azotea. Puedes mirar hacia la Plaza Barkhor, donde los devotos tibetanos acuden en manada al templo, y contemplar el Palacio de Potala y las colinas a lo lejos.
El Templo de Jhokang se convirtió en Patrimonio de la Humanidad en 2000, como una extensión del sitio del patrimonio del Palacio de Potala.
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