Old Cataract (Asuán, Egipto)
Aunque en enero se cumplieron 41 años de la muerte de Agatha Christie, su legado literario continua fascinando a generaciones de lectores ávidos por resolver junto a Hércules Poirot, Miss Marple o Tommy y Tuppence Beresford apasionantes enigmas. Y es que la imaginación y la habilidad de esta prolífica escritora, apodada “la reina del crimen”, no tenían límites.
Mujer avanzada a su tiempo, la novelista británica tuvo una vida apasionante. En compañía de su segundo marido, el arqueólogo Max Mallowan, viajó durante largas temporadas por Oriente Medio -Irak, Siria y Egipto-. Su pasión viajera y su atracción por escenarios ligados a su tierra natal hizo que muchas de sus obras se escribieran o hallaran su inspiración en reconocidos hoteles.
Uno de los hoteles es el hotel
HOTEL OLD CATARACT
Las impresionantes vistas del Nilo, de la Isla Elefantina y del mausoleo del Aga Khan a lo lejos desde la terraza del Old Cataract inspiraron a la escritora a escribir Muerte en el Nilo (1937), protagonizada nuevamente por el célebre detective belga, que en esta ocasión debe resolver una serie de asesinatos en un crucero fluvial.
A las puertas del gran desierto nubio, en Asuán, la novelista pasaba largas temporadas alojada en este palacio victoriano del siglo XIX con toques árabes, exquisitamente decorado, escogido también por otras celebridades como Churchill, el escritor Saint Exupery o Howard Carter tras descubrir la tumba de Tutankamón.
A pesar de su reforma, el Old Cataract conserva el glamur de los años 30 del siglo pasado, lo que permite imaginarse a la novelista británica sentada en una butaca de mimbre, tomando un té y contemplando un atardecer frente al Nilo. El establecimiento, ahora de la cadena Sofitel, cuenta con la suite Agatha Christie, en su honor. Es posible dormir en una de las habitaciones de este hotel a partir de 200 euros la noche