CUADERNO DE VIAJE A TURQUIA
El viaje a Turquía está
en la lista del Grupo Obregón, hace muchos años, lo hemos ido retrasando por
distintas razones, es un destino, relativamente cerca, que en cualquier
momento, que se anulase otro viaje, podríamos ir, pero no ha surgido.
Ha sido un destino comodín. Pero todo tiene un final, y este
año ha llegado el momento, septiembre parecía adecuado, para Turquía, ni demasiado
calor ni mucho frio, pero todos los turistas pensaron como nosotros y había demasiada
gente.
DIA
1-VIERNES NOCHE-SABADO 20 SEPTIEMBRE 2025-
No nos gusta nada ir a coger el avión a Madrid, es agotador,
cuando llegas al destino estas muerto, pero en este caso no ha quedado otro
remedio.
El autobús de Donato,(con Toño al volante, Oscar está de
vacaciones), comienza a recoger en Astillero, a las 10,15,
Continúa por Maliaño, Santander, Torrelavega y Reinosa.
A las 4, 30 ya estábamos en el aeropuerto de Barajas,
terminal 1.
En los días anteriores había una huelga, los que pasan el
control y se habían hecho colas kilométricas, incluso algunos viajeros habían perdido
su vuelo, por lo que se decidió ir antes.
La verdad que no se
nos hizo largo, nos pusimos en la fila para facturar en el mostrador Turkish
Airlines, con esta compañía hemos volado a menudo últimamente
Facturar todo el grupo lleva un ratito, pasamos el control,
pasaportes, con nuestras camisetas azules, que estrenamos en nuestro viaje 40 a
Italia, para que vean que somos un grupo y todo sea más rápido.
Embarcamos a la hora prevista, y dormimos mucho en el vuelo.
Al llegar, pasamos pasaportes y recogimos nuestras maletas y salimos
pensando que alguien nos esperaba, pero no había nadie.
Tras dar unas vueltas e investigar, nos esperaban en la
puerta 8.
A quien habían informado de eso, a nadie.
Nos recogió un chico, que estaba a todo menos a lo que tenía
que estar, nos dijo que había llamado al autobús y que vendría en 20 minutos y
se fue a tomar café y allí nos dejo. Nada que ver con cómo te reciben en Asia
en la India, en Nepal, en Buthan, que está el equipo al completo esperándote.
Tras el trayecto al hotel con un tráfico infumable, un sábado
al mediodía en una ciudad de 20 millones de habitantes.
Llegamos a nuestro hotel Dossi Dosso Downtown.
El hotel muy agradable, le personal, escaso pero atento. Y
por primera vez vemos que se necesita el número de pasaporte para conseguir wifi, pero vamos a ver, quien se sabe el pasaporte, bueno un mal menor, si
no lo conseguías en recepción te lo solucionaban.
Decidimos ir al centro en tranvía, con la ayuda de Murat y un
amigo y por el camino cambiamos dinero.
Vamos en tranvía descubriendo la ciudad, especialmente los viajen
allí por primera vez.
Visitar por primera vez un país o una ciudad es algo maravilloso,
todo es nuevo, y te sorprende, y mas una ciudad como Estambul,
Una de las ciudades más bonitas del mundo, sin ninguna duda
Eminonu, es el lugar donde salen los barcos que navegan por
el Bósforo.
Nos bajamos alli y disfrutamos del ir y venir de los barcos,
del puente donde había una fila de pescadores que no dejaban ni un hueco libre,
desde allí podíamos ver varias mezquitas, una creo que era la de Soleiman, si
no me equivoco una de las más grandes.
Enfrente de nosotros en la otra orilla, la
torre de Gálata sobresale por encima del resto de los edificios, muy elegante.
Murat y su amigo nos comentaron que era típico comer un
bocadillo de pescado, lo podíamos ver como lo hacían en unas barcas, junto al
muelle, había mucha gente sentada y otros esperando para coger sitio. El
bocadillo de pescado estaba rico, pero
la bebida típica que acompañaba, roja con mucha sal y encurtidos,
infumable para mi gusto, pero otros lo
disfrutaron.
Tras disfrutar de la zona de Eminonu, con la gente paseando, un cantante amenizando con música del país, barcos que iban y venían cruzando al otro lado, y cruceros que venían de pasear a los turistas por el Bósforo, de repente la ciudad oscureció y todo se ilumino, las mezquitas sobresalían por encima con su luz y sus minaretes, el puente con sus luces, los pescadores con sus cañas. Precioso, la ciudad cobro vida con la luz. Maravillosa ciudad
Cruzamos el puente, disfrutando de las vistas y subimos hacia la torre de Gálata, parecía que estaba cerca, pero no estaba tanto y hay que subir unas escaleras muy altas y ya estábamos cansados, todo, decorado con banderines, muy alegre, un lugar encantador toda la subida acompañada de tiendas vintage muy alegres y coloridas.
TORRE DE GALATA
La Torre Gálata (Galata Kulesi) es una de las torres más antiguas del mundo. Desde su parte más alta se obtiene una de las mejores vistas de Estambul.
La primera Torre Gálata fue construida en madera en el año 528 para
servir como faro. En 1348 fue reconstruida por los genoveses con el nombre de
Torre de Cristo.
Durante la conquista de Constantinopla en 1453, la torre fue ocupada por el Sultán
Mehmet II.
Su altura, de tan sólo 61 metros, no es lo que más llama la atención
de sus medidas. Lo que resulta sorprendente es el diámetro y la anchura de las
paredes.
El diámetro de la torre en la base es de 16,5 metros en el exterior y de
8,9 metros en el interior. Esta diferencia indica que los muros tienen una
anchura de 3,7 metros en la base.
La anchura de los muros de la Torre Gálata va disminuyendo según se va
ascendiendo a la cima, llegando hasta los escasos 20 centímetros en la parte
superior.
Al llegar arriba había una cola que rodeaba la torre para subir arriba y enseguida empezó a vestirse de colores y motivos, bailando alrededor de la torre, y todo esto termino con la bandera de Turquía,
Un bonito final de un día tan largo disfrutando de un bonito espectáculo
Y regreso al hotel en Tranvía, el día ya ha sido lo
suficientemente largo desde que salimos de casa
Nuestra cómoda cama en el hotel nos espera
DIA 2- DOMINGO 21 SEPTIEMBRE 2025.
A las 8 de la mañana nos reunimos en el hall del hotel para
salir y llega el guía, a quien aun no conocíamos, solo su foto.
Continuamos con el conductor que nos recogió en el
aeropuerto. Una persona muy correcta y agradable
Nos dirigimos hacia la
mezquita de Solimán
La Mezquita de
Solimán el Magnífico es una de las mezquitas más bellas,
famosas y visitadas de Estambul.
Fue construida entre los años 1520 y 1566 por orden de Solimán
I, más conocido como Solimán el Magnífico, uno de los sultanes otomanos más
ricos y poderosos de la historia, quién encomendó al reconocidísimo arquitecto
Mimar Sinán su diseño.
La Mezquita deja impresionados a los visitantes por su tamaño,
su sencillez, sus excepcionales azulejos de iznik que decoran el mihrab, por
sus preciosas vidrieras que proyectan una inmensa luz a través de sus 138
ventanas y por sus imponentes columnas. Posee cuatro minaretes, dos de ellos
con tres balcones y los otros dos con dos. Los hizo construir así Solimán para
recordar que fue el cuarto Sultán desde la conquista de Estambul y el
décimo desde la fundación del imperio otomano.
Tanto Solimán, como su esposa Roxelana y el propio arquitecto
están enterrados en el cementerio situado detrás de la Mezquita
Está considerada como la obra
más representativa del arte islámico.
Tras la visita de la
mezquita el autobús nos llevo al barrio de Fener, es una zona donde vive la
comunidad judía, y allí se encuentra la iglesia ortodoxa de San Jorge.
Barrio: Fener y Balat
Esta
zona de Estambul, tranquila y socialmente conservadora, alberga una pequeña
pero floreciente comunidad judía, el patriarcado de la iglesia ortodoxa
oriental, arte cristiano y algunas de las iglesias más hermosas del mundo. La
mayoría de los lugares de interés de Fener y Balat se encuentran entre lo que
queda de las antiguas murallas de Constantinopla y las tranquilas aguas del
Cuerno de Oro. A pesar de los muchos y espléndidos lugares llenos de encanto,
las atracciones históricas, las impresionantes vistas y la cálida hospitalidad
turca, la zona no ha sido invadida por el turismo en la misma medida que la
cercana Sultanahmet o los alrededores del Gran Bazar. A los viajeros a los que
les guste explorar las zonas menos concurridas les merecerá la pena el esfuerzo
que hagan para visitar esta tranquila área de la ciudad.
El barrio muy agradable, lo primero nos dirigimos hacia San
Jorg, y ese momento estaban oficiando una misa que parece ser que dura 2,30 horas.
Los sacerdotes estaban cantando y fue muy bonito, se ponía la piel de gallina
al escucharlo
La iglesia preciosa, y después paseamos por el barrio, un rincón
muy agradable y pintoresco, con alegres terrazas en la calle, y los lugares y
las tiendas muy in, incluso rodaban para una peli o similar en un lugar. Daba
pena abandonar el barrio, con tanta tranquilidad, pero el paseo por el Bósforo
nos esperaba
Cruzamos la calle para coger el barco, y ya estaba un grupo
anterior, eran de Suramérica, y las mujeres estaban disfrazadas con unos trajes
de la época, después vimos que hacían fotos con lso trajes en un trono
El tiempo era magnifico, y el paseo en barco, paseando por
los diferentes monumentos de la ciudad, Los palacios de Dolmabache, mezquitas,
y pasando por debajo del puente que separa Europa y Asia, el final del Bósforo te lleva al mar negro. A la derecha se puede
ver, la zona donde están las casas con mejores vistas, y la izquierda la mayoría
son hoteles, y complejos turísticos. También se pueden ver las casas de madera que
quedan pintadas de colores, antes las casas eran todas de madera.
El Bósforo no es sólo un
estrecho que separa dos continentes; es una vía fluvial estratégica impregnada
de historia y cultura desde la época de los antiguos griegos hasta el Imperio
Otomano y la actualidad.
A lo largo de los siglos, ha sido testigo del ascenso y la caída
de civilizaciones, ha desempeñado un papel fundamental en guerras y conquistas
y ha servido como ruta comercial vital para conectar Europa y Asia, al tiempo
que ha seguido siendo el centro del comercio internacional. Hoy en día, el
estrecho del Bósforo sigue siendo un testimonio del espíritu perdurable de
Estambul y sus gentes.
Tras el delicioso crucero por el Bósforo, nos fuimos a comer,
la comida rica, pero atestado de gente, como todos los lugares
Sopa, verdura, carne y postre. La verdad que bastante rico
Y para la tarde una visita al BAZAR DE LAS ESPECIAS
Bazar de la especias o Bazar Egipcio (Mısır Çarşısı), es el
mercado más grande de productos
típicos como especias, dulces o frutos secos de
Estambul.Su nombre en turco Misir Çarsisi tiene un doble significado ya que misir es tanto
Egipto como cereal.
Por lo tanto su origen podría provenir de las diversas especias que se
traían desde la India y el sudeste asiático y entraban por Egipto,
distribuyéndose luego desde Estambul a toda Europa; o de la época bizantina en
que se comerciaba mucho con cereales.
La
construcción del bazar comenzó en 1660, por orden de Hatice Turhan, la madre de Mehmed IV,
con el fin de mantener financieramente la Nueva Mezquita, junto a la cual se
encuentra. El mercado tiene 6 entradas y 86 tiendas.
Pese a que muchos de
los puestos de especias han sido sustituidos por otro tipo de negocios, el
bazar aun siguen regalándonos los olores y sabores con los que se
construye la deliciosa gastronomía turca.
La variedad de
productos es inmensa, así podemos encontrar vasijas llenas de especias, frutas
deshidratadas, frutos secos, delicias turcas, baklavas y una larga variedad de
postres que provocan un impacto visual y olfativo difícil de olvidar.
Algunos visitamos unas mezquitas cercanas, una de ellas con
vistas al Bósforo, con un portón abierto al mar, maravilloso
El autobús nos llevo al hotel, donde tenemos piscina y spa,
pero nos decantamos por una de las 5 actividades
extra que llevábamos preparadas, visitar un Haman y darnos un baño turco
Y para alla nos fuimos, un grupo de 17, catorce mujeres y
tres hombres
Hamam de Cemberlitas El Cemberlitas se encuentra en Yeniceriler Caddesi,
muy cerca del Gran Bazar.
Cuenta con gente muy profesional
y tiene un apartado para hombres y otro para mujeres, de ahí que el horario sea
el mismo para ambos sexos.
El servicio comprende un periodo de relax sobre una base de mármol
caliente que se halla en el centro de la sauna y una sesión de masajes con
jabón.
El baño tiene dos secciones idénticas, una
para hombres y otra para mujeres. Los interiores son muy elegantes, con paredes
y pisos de mármol, columnas que sostienen las numerosas bóvedas, y linternas
que permiten el paso de luz natural. Hay zonas de uso común y cubículos
privados.
Cuando termina tu sesión te sentirás como nuevo, es el momento de beber
agua, tomar un té turco y disfrutar de la ciudad con energías renovadas.
El Hamam de Çemberlitaş fue construido por Sinan en
1584 durante el mandato de la “Sultana” Nurbanu, nacida en Venecia a mediados
del siglo XVI y llevada a Estambul por corsarios otomanos. El toque de Sinan se
aprecia al contemplar las cúpulas desde el interior.
La mayoría de la clientela era turca, lo que
enriquece la experiencia, observando los ritmos del rito. Entrar en el hamán
purifica cuerpo y alma, su lujo es el silencio, el mármol, el vapor, la
ausencia de ruido, los techos altos, la luz natural, el aroma a té y jabón.
La verdad fue breve
pero agradable y regresamos hacia el hotel, como nuevas, no pudimos
volver en tranvía, se había roto la catenaria
Un gran día disfrutando de Estambul
DIA 3- LUNES 22 SEPTIEMBRE 2025.